Diario e impresiones del autor en su día a día.

viernes, abril 27, 2007

Viernes de bajón

Siento dirigirme a vosotros hoy en un estado de ánimo más bajo. Hoy me siento triste y un poco deprimido no sé bien por qué. Debería estar contento porque ayer tuve un ágape de un compañero que se despidía del proyecto (para unirse a otros nuevos proyectos) además de que ayer por la tarde volví a quedar con el texano-coreano.

La verdad que el texano-coreano se portó muy bien como la otra vez y estuvimos hablando esta vez de televisión, cine, carnés de conducir y sus clases de español y las mías. También le pregunté porque hacemos los fines de semana.

Pero aún así tengo la sensación de que la conversación entre el texano-coreano y yo no era fluida. Y creo que puede ser porque soy muy tímido e introvertido y esto me dificulta hablar con la gente al menos uno a uno y no en grupo. A veces esto me hunde moralmente porque tengo la sensación de que me supone limitaciones para encontrar y/o mantener amistades y parejas o relaciones personales en generales por mi mismo. A veces puede resulta realmente frustrante.

También observé que en el agape de la despedida de ayer a mi me costaba hablar con la gente allí reunida y por otra parte algún compañero mío tenía una facilidad tremenda. Hay que decir que este compañero es andaluz y eso por lo general ayuda bastante, vamos que te da labia o elocuencia y chispa o gracia.

En fin creo que lo correcto es que no debería darle tantas vueltas e intentar ver el vaso medio lleno en vez de medio vacío. Lo intentaremos que no es fácil y también llegar lo más posible, que no debe ser mucho dentro de nuestras limitaciones.

Así intentaré disfrutar y pasar un buen rato en mi clase de inglés de hoy por la tarde, a ver si vamos bastantes. Y el resto del día aparte de trabajar pues aprovechar para descansar un poquito.

Tengo que darme ánimos: ¡ Ánimo !, también se los doy a aquellos que me lean y que tengan un poco bajo los ánimos.

jueves, abril 26, 2007

Recuerdos de una compañera de instituto

Cuando empecé el instituto tuve problemas de adaptación con mis compañeros de clase en general, ya con los que no solía congeniar bien porque no les caía bien ya porque les resultaba indiferente a otros chicos ya porque no dedicaba esfuerzos a integrarme y/o relacionarme.

Bueno había una excepción una chica que se solía sentar delante de mí. Al contrario que yo esta chica era muy extrovertida y tenía su grupo de amigas dentro de la clase.
Pero le costaba algunas asignaturas y yo era bastante inteligente y me pedía ayuda. A cambio de buena fe supongo solía hablar bastante conmigo y me hacía bastante más amena y llevadera la estancia en clase y en el instituto, donde muchas veces me sentía solo. Esto se lo agradecí mucho porque me daba la sensación de que era una amiga mía, y lo necesitaba bastante. Por ello siempre he guardado buen recuerdo de ella.

El caso es que siempre la he echado de menos en todos estos años (hablo ahora ya 16 o 17 años después) y siempre me he preguntado que habría sido de ella.
La he llegado a poner un mensaje en algunas de esas web para reencontrarse con viejos compañeros del colegio, del instituto o de la universidad. Pero en vano.

Sin embargo hace unos días encontré una dirección y un número de teléfono de ella (su nombre y sus apellidos son muy peculiares y los recordaba) y los apunté en un papel.
Durante varios días me debatí entre mi deseo de llamarla por saber de ella y no llamarla por miedo a que se lo tomara a mal porque pensase que tenía una especie de manía persecutoria.

Total al final tras consultar con varios personas me decidí a llamarla y también un poco con una pequeña esperanza de poder quedar a tomar un café en estos días de puente de mayo que se avecinan este fin de semana.

Tras dudar varios días, finalmente me decidí a llamarla ayer sobre las 9, que pensaba sería buena hora (suficientemente tarde para que le diera tiempo a haber llegado del trabajo y suficientemente pronto para que todavía no se hubiera ido a dormir).
Al llamar el teléfono me descolgó el teléfono un hombre que tenía una voz bastante tranquila y que no se molestó cuando le contó el propósito de mi llamada. Es más me contó que estaba ocupada mi ex compañera de instituto atendiendo una llamada de móvil. Luego ella terminó con esa otra llamada de teléfono y se puso a hablar conmigo después de que el hombre le pasase mi llamada.
También me extrañó que tuviera una actitud bastante tranquila y que no se enfadase conmigo.

Recordamos viejos tiempos, me contó que había estudiado Derecho, yo le dije que Teleco y que el hombre que había cogido la llamada era su marido. Pareció alegrarse un poco de que la llamase.

Yo no sabía si la molestaba y como estaba un poco nervioso le sugerí que si no era el momento adecuado podíamos hablar más adelante. Al final le dí un correo electrónico y me dijo que me escribiría y que me contaría cosas.

Tengo ahora dudas de que finalmente me escriba al correo electrónico pero me gustaría que me llamase. Espero que sí, aunque con dudas reservadas.
No me importaría convertirme en amigo suyo y de su marido y que de vez en cuando saliesemos a tomar algo. Pero esto creo que es difícil y son demasiadas esperanzas que albergo.

El caso es que yo después de la llamada me quedé nervioso y emocionado en parte por mi osadía en parte por la respuesta agradable recibida.
Bueno, a ver si tengo suerte y al menos mantengo un contacto por mail o por teléfono con esta chica, ya mujer, y si quiere también pues con su marido además.

lunes, abril 23, 2007

Caminante no hay camino: Tras el fin de semana en Arroyo de la Cueva


A tu aire. Senderismo.

Tras el fin de semana en Arroyo de la Cueva

Es lunes de nuevo y queda de nuevo el fin de semana atrás, aunque parece que tengo recargadas las pilas después de haberme ido a la excursión de senderismo. Tal vez lo vuelva a repetir otra vez. Fui con un amigo de la Universidad y ya me ha comentado que a ver si lo repetimos para el 6 de mayo. Yo intentaré proponerle el 5 de mayo que es sábado y que al día siguiente es domingo y puedo dormir todas las horas necesarias para descansar.

Pero bueno el fin de semana fueron muchas otras cosas aparte del senderismo como ya comentaba el último viernes.

La primera del sábado era si salir en coche o no, qué basicamente fue sacarlo para llevar a comprobar en la gasolinera la presión de las ruedas. Parecía que cada una de todas las ruedas había perdido en un día 0,2 bars pero por lo que me comentó un hombre en la gasolinera es normal esa diferencia si el coche lo acabas de sacar del garaje y apenas se ha movido con respecto a si lo llevas y traes del trabajo que se ha movido, ha hecho kilometros y cambia la presión de las ruedas. También el mismo hombre me comentó que es muy extraño que se pinchen las cuatro ruedas a la vez. Por lo que de momento podemos estar tranquilos. Aunque seguiremos echándole un ojo.

El sábado por la mañana, también fui con mi madre a una tienda Decimas para comprar un chubasquero por si acaso llovía en la excursión de senderismo. Nos atendió un chico bastante agradable y básicamente nos presento dos modelos uno que era solo impermeable y otro que llevaba impermeable y forro polar por debajo. Nos parecía que el forro polar tenía un tejido impermeable más fino que el otro, así que nos decantamos por el del impermeable sin forro (que además era más barato). Además ya tenía un forro laminado que ya había comprado para la excursión de Semana Santa. Esta vez el impermeable tenía gorro, que era lo que no tenía el forro laminado del que había comprado para la excursión de Semana Santa. Luego en casa probamos el forro laminado y el chubasquero e iban bastante bien. Con lo que quedamos contentos.

Por la tarde me dirigí a Bilbao donde había quedado con el irlandés del intercambio. Pero tras llegar allí me llegó un mensaje de móvil del irlandés donde me contaba que estaba malo y que no podía acudir, pero que si quería podíamos quedar otro día de esta semana que entra con este lunes para el intercambio. ¡ Vaya chasco ! A pesar de ello le contesto diciéndole que esperaba que se mejorase y que tal vez podríamos quedar el siguiente viernes. Por otra parte, bueno, como ya estaba por allí por Bilbao, pues me dí una vuelta por la zona y al final me metí en un bar de estilo cubano donde pedi una maravillosa piña colada que estaba exquisita y que me sirvieron en un maravilloso copón enorme aunque les pedí que no me echasen mucho ron. Estaba exquisito pero el precio era acorde, caro de unos 6 euros. Pero en fin mereció la pena y al fin y al cabo pues tampoco me doy tantos capricho, ¿no?


Luego el domingo era la excursión de senderismo.
Que preparamos el sábado por la tarde anterior la mochila con el chubasquero comprado, unos pantalones de chubasquero que ya tenía, un jersey por si hacía frío y luego fuera el forro laminado. Luego los bocadillos para la comida que dejamos enfriar durante la noche en el frigorífico.
Al día siguiente, el domingo ya, me levanté sobre las 7:40 totalmente descansado, pues me había acostado muy temprano el sábado. Después de desayunar e ir al metro, al llegar a Moncloa, me encontré con mi compañero de universidad que estaba hablando con una de las chicas del grupo. ¡ Una chica o mujer bastante guapa! Hay que ver que tino siempre tiene este amigo y luego siempre se quita importancia.
Después ya nos montamos en el autobús donde yo me tuve que sentar con otra chica con la que coincidimos en la excursión luego y que era muy maja.
Por lo demás el autobús se perdía a eso de las 12 y tuvo que volver sobre sus pasos lo que hizo que se retrase la marcha y la hora de vuelta para Madrid en Moncloa de las 8:30 prevista a las 9:30 reales. Pero no estuvo mal.
La ruta en sí, que habíamos elegido el nivel básico, no estaba mal. Hubo dos tramos donde yo fui un poco más apurado. Una de una subida, donde apenas podía hablar sin perder el aliento y otra de bajada con muchas piedras.
Pero me lo pasé bien, iba hablando bastante con mi amigo de la universidad de la marcha y a veces también con la chica con la que me senté en el autocar por la mañana.
Después de la marcha paramos primero en un pueblo y luego en un río. El pasaje del río era muy bonito con un pequeño estanque, poza, o charca donde muchos compañeros de marcha se remojaron los pies y además tenía un par de puentes, uno romano y uno moderno de fondo.
Luego ya recogimos a los compañeros que habían hecho la ruta de nivel alto y nos dirigimos para Madrid. Allí llegamos a Moncloa a las 9:30.
De nuevo en el metro, después de despedirme de mi amigo de la universidad, coincidí con la chica con la que había me sentado por la mañana en el autocar y con otro chaval que estaba hablando con ella. Con lo que vine acompañado en el metro medio trayecto.
Al final después de ir por la 6 hasta Nuevos Ministerios, por la 8 hasta Mar de Cristal y por la 4 hasta Canillas llegué a casa sobre las 22:15. Unos 45 minutos de trayecto no está mal. Seguramente por la 6 hasta Avenida de America y por la 4 hubieran sido 60 minutos.
Finalmente mis padres me recibieron preguntadome qué tal había pasado el día y acompañándome mientras hacía una cena ligera. Intenté terminar pronto para acostarme pronto, sobre las 22:40, y dormir y descansar para ir el día siguiente fresco al trabajo.
Aunque tengo que reconocer que hoy lunes estoy un poco cansado y con algo de sueño.

En breve hoy lunes tomaré un café, miraré un poco las noticias y me pondrés las pilas con las tareas. Especialmente con esa tarea pendiente que tengo... A ver si le doy marcha.
Bueno eso es todo. Últimamente hago más cosas estos fines de semana. Espero que siga así y no vuelvan los fines de semana aburridos de antes. Ya veremos.